“No sabes lo que no sabes, así que debes dedicarte a aprender algunas cosas”.
is living with type 2 diabetes in NIR
Desde el momento del diagnóstico, la diabetes tipo 2 es una afección que debe manejarse.
Esa es la buena noticia: que es manejable. Muchas personas con diabetes tipo 2 tienen una vida larga, activa y gratificante , pero la vida con diabetes también puede ser estresante.
El estrés también puede afectar la diabetes. Cuando está estresado, su cuerpo libera hormonas, como el cortisol, que aumentan la cantidad de azúcar en la sangre.
Esto no solo puede complicar el manejo de la diabetes, sino que el estrés frecuente o a largo plazo puede tener efectos físicos y mentales. Y leer eso probablemente no lo calme.
Entonces, cuando necesita relajarse, ¿qué puede hacer? Estos son cinco consejos para comenzar.
Recibir un diagnóstico de diabetes tipo 2 puede ser abrumador. La presión de no saber lo suficiente al respecto más el hecho de verse bombardeado repentinamente con más información de la que puede digerir puede hacer que al principio se sienta indefenso.
La realidad es que no lo comprenderá bien de la noche a la mañana. Mejorará en el manejo de su diabetes con el tiempo. Comience concentrándose en lo que debe saber para controlar su azúcar en sangre en los próximos días y semanas. Una vez que tenga eso bajo control, puede planificar cómo manejar con éxito su diabetes tipo 2 en el futuro.
No hay puntos extra por despertarse antes del amanecer y llevar
ventaja durante el día. Sin embargo, una buena manera de despejar la
cabeza, sentirse fresco y poner en marcha su metabolismo es ponerse en
movimiento temprano en el día.
No tiene que ser extenuante. Tal vez sea solo un paseo por el vecindario, hasta su lugar de trabajo o las tiendas locales. Quizás un paseo en bicicleta. O una sesión de yoga para estirar las extremidades y hacer que la sangre fluya.
Se recomienda hacer ejercicio durante solo 30 minutos, cinco veces por semana, para
ayudar a reducir el estrés y mejorar su salud cardiovascular. Incluso la actividad física moderada puede reducir el riesgo de enfermedades cardiovasculares, como el ataque cardíaco y el accidente cerebrovascular.
“No sabes lo que no sabes, así que debes dedicarte a aprender algunas cosas”.
La diabetes ha existido durante mucho tiempo. Lo más probable es que haya conocido a varias personas que tienen diabetes tipo 1 o tipo 2.
Hoy en día, se dispone fácilmente de información precisa sobre la diabetes tipo 2, y las muchas formas de controlarla, a través de fuentes confiables. Asegúrese de preguntarle a su médico general o a un especialista sobre cualquier inquietud que pueda tener. También puede ser tranquilizador hablar con otras personas que viven con diabetes tipo 2. Solo recuerde que el proceso de cada persona con diabetes tipo 2 es diferente.
La diabetes tipo 2 es muy manejable, pero no se maneja sola.
Intente imaginar su mejor vida posible con diabetes. Tal vez suponga bailar en la boda de su hijo, correr un maratón o simplemente disfrutar de los alimentos que le encantan mientras mantiene en control su azúcar en sangre. Para que esto suceda, necesita un plan paso a paso.
Esto podría tomar la forma de un plan de comidas para la semana siguiente, objetivos mensuales de ejercicio o una lista de preguntas que desee hacerle a su médico. Mantenga sus planes tangibles y graduales para mantenerse motivado. Si bien planificar en torno a la diabetes puede parecer restrictivo al principio, un plan realista también puede ayudarlo a sentirse en control de su situación.
“Ahora me he dado cuenta de que si la manejas correctamente, no vuelves atrás en el tiempo exactamente, pero puedes tener una vida feliz”.
Debido a la naturaleza progresiva de la diabetes, sus necesidades de tratamiento pueden cambiar con el tiempo.
En la actualidad, existen muchos tipos diferentes de tratamientos para ayudarlo en las diversas etapas de su proceso al transitar la diabetes. Esto significa que también hay muchas oportunidades para hacer cambios positivos.
Las personas que han tenido dificultades para controlar su glicemia poseen más opciones que nunca antes. Además de ayudarlo a establecer objetivos alcanzables, su médico puede ayudarlo a comprender los muchos tratamientos disponibles y dónde se encuentra en su proceso terapéutico. Juntos, pueden decidir el camino correcto para su situación particular.